La última vez que hablamos de Zoom, decíamos que siempre que nos referíamos a la plataforma de videollamadas era para dar una nueva mala noticia, casi siempre haciendo referencia a sus escasas medidas de seguridad y privacidad que la colocaban en el centro de todas las críticas especializadas, a pesar de haberse convertido en todo un éxito para los usuarios durante el confinamiento por culpa del Coronavirus.
No sé si a vosotros os pasa lo mismo, pero a mí me resulta bastante chocante que en pleno 2020, con más de trece versiones del Sistema Operativo en el mercado y tanta tecnología aplicada a la seguridad de nuestros dispositivos móviles, exista un simple mensaje de texto que sea capaz de bloquear un aparato tan complejo como un smartphone.
A pesar del indudable éxito que ha tenido como herramienta de comunicación durante este confinamiento a causa del Coronavirus, superando incluso a Skype, Zoom se ha convertido también en un objetivo para hackers y ciberdelincuentes, que encuentran en la popular plataforma de videollamadas una tentación muy golosa para sus actividades.
La app de videollamadas Zoom, pese a su desorbitado crecimiento y popularidad durante esta época de confinamiento a causa del Coronavirus, sigue experimentando casi un varapalo a la misma altura a causa esta vez de las brechas de seguridad que siguen afectando a la plataforma.
Una de las consecuencias derivadas de la pandemia del COVID-19 es el confinamiento en nuestros hogares para la enorme mayoría de las personas cuyos trabajos no son considerados como esenciales por los gobiernos. Este confinamiento supone un alejamiento físico de nuestros amigos, compañeros e incluso de nuestra familia, pero eso no supone necesariamente que perdamos el contacto con ellos.
Ha pasado bastante tiempo desde que el iPhone SE empezó a necesitar ya una puesta al día urgente para ser una opción competitiva en el mercado de los smartphones, pero hoy Miércoles 15 de Abril, Apple ha presentado la nueva generación del dispositivo. Una presentación alejada de fanfarrias y eventos en directo, una presentación aséptica y con la misma distancia social con la que la mayoría estamos viviendo estos meses.
Decíamos ayer que el el Apple Watch podía ser una herramienta estupenda para ayudar a diseñar la estrategia de lucha contra el Coronavirus. Las autoridades sanitarias alemanas aprovechaban la versatilidad de los smartwatches para conocer las pautas de expansión de la pandemia en base a sus usuarios, pero existen otras maneras de luchar contra la enfermedad, empezando por nosotros mismos.
A raíz de que la pandemia del Coronavirus nos obligase a tener que confinarnos en nuestros hogares por un tiempo cada vez más indefinido, la app de videollamadas Zoom se ha ido haciendo cada vez más popular entre los usuarios, que recurren a ella como medio para comunicarse con sus amigos, compañeros y seres queridos.