Consejos para mantener limpio tu iPhone y que no se convierta en un foco potencial de transmisión del Coronavirus

Hace apenas unas horas, España declaraba el Estado de Alerta a causa de la rápida extension del Coronavirus en el país y en prácticamente el resto del mundo. Quedarse en casa el mayor tiempo posible es una de las soluciones propuestas, así como la insistencia en lavarse las manos para evitar la transmisión de patógenos como los del COVID-19. Al fin y al cabo con ellas tocamos a diario todo nuestro entorno, desde las puertas de los edificios a los botones del ascensor, pasando por los elementos de los transportes públicos.

Hay una cosa que probablemente toquemos aún más: los teléfonos móviles. Desde que los smartphones se han vuelto absolutamente táctiles, son una de la superficies que más tocamos en nuestro día a día, y qué decir cuando los acercamos a la cara o a la boca para hablar por teléfono o se los dejamos a otras personas para ver fotos, memes o que los niños se entretengan un rato. ¿Puede el Coronavirus transmitirse por la superficie de nuestro iPhone? ¿Podemos hacer algo para evitarlo? La respuesta es sí. A ambas preguntas.

La hipótesis más plausible acerca de la transmisión del Coronavirus es que ésta se produce vía contacto por las secreciones del portador al toser o estornudar. Las partículas de estas secreciones pueden depositarse sobre diferentes superficies a través de las cuales otras personas pueden infectarse si las tocan y luego se llevan las manos a la nariz, los ojos o la boca. Superficies como la pantalla de nuestro iPhone a la que, según algunos estudios, tocamos casi 2.600 veces al día. Es decir, que si somos portadores del virus, contaminaremos nuestro smartphone con absoluta seguridad, la misma con la que nos contagiaríamos si interactuamos con el de un portador, todos fabricados con materiales que pueden mantener el virus activo durante más de una semana.

Por eso es muy importante que mantengamos limpio nuestro dispositivo. Lo es siempre, pero aun más en caso de máximo riesgo como sucede ahora, por eso no está de más recordar algunos consejos para limpiar nuestro iPhone de la manera más eficiente.

La mayoría de los smartphones poseen una superficie que repele partículas como grasa y huellas dactilares y que puede perder efectividad si se utilizan determinados productos químicos agresivos, estropajos o aerosoles. El procedimiento ideal es apagar completamente el iPhone para evitar daños y limpiar la pantalla utilizando únicamente un paño suave y sin pelusas ligeramente húmedo con un poco de agua y jabón. también podemos pasar con cuidado toallitas impregnadas en alcohol isopropílico del 70% o toallitas desinfectantes de la marca Clorox por las superficies exteriores del iPhone. No deberemos usar nunca lejía y evitar que entre humedad por las aberturas o sumergirlo en ningún agente limpiador.

De esta manera mantendremos lo más limpio posible una de las superficies transmisoras de virus más potencialmente peligrosas que existen, sobre todo teniendo en cuenta que entre cada vez que interactuamos con nuestro móvil nos solemos tocar la cara una media de 23 veces cada hora (casi la mitad en áreas como la boca, la nariz o los ojos)

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