Dato curioso: cae en picado el número de niñas a las que sus padres deciden ponerles de nombre Alexa o Siri

Los asistentes de voz están ganando cada vez más importancia en nuestras vidas. Nos ayudan a organizar el día a día, nos guían a nuestro destino, controlan los dispositivos inteligentes de nuestra casa, nos informan de cómo quedó nuestro equipo de fútbol favorito, o simplemente nos advierten del tiempo que hace antes de salir de casa.

Siri, Alexa, Google Assistant o Cortana. Las opiniones sobre cuál es mejor o peor son muy diversas, ya que es algo que depende en gran medida de nuestros usos particulares, nuestro país, nuestro idioma y el ecosistema de productos y servicios que más empleamos. En lo que prácticamente todos sí que estaremos de acuerdo es que, en el momento actual en el que vivimos, que tus padres te pongan de nombre el de uno de estos asistentes cuando vienes al mundo debe ser una gran faena.

Amazon lanzó al mercado su asistente Alexa en 2015 y, según publica hoy Recode, ese mismo año en Estados Unidos a 6050 niñas sus padres decidieron ponerles ese mismo nombre. Desde entonces el asistente de Amazon ha ido ganando cada vez más popularidad y, como consecuencia de ello, Alexa ha dejado de ser una opción para muchos padres a la hora de elegir nombre para sus futuras hijas. La popularidad de este nombre en Estados Unidos ha caído un 33 por ciento, y probablemente lo va a seguir haciendo de ahora en adelante. Según la información proporcionada por la Administración de la Seguridad Social en ese país, en 2017 solo 3883 niñas fueron llamadas Alexa.

Con Siri ha ocurrido algo parecido, aunque bien es cierto que es un nombre mucho menos popular que Alexa. En 2011 Apple presentó su asistente como una de las novedades del iPhone 4S y dos años antes 120 niñas fueron llamadas Siri en Estados Unidos. Una cifra récord que ha caído en picado, hasta el punto de que este pasado año solo 20 niñas fueron llamadas Siri. Un 84 por ciento menos.

Probablemente muchos de estos padres no quieren que se active su asistente de voz cada vez que llamen a su hija, ni tampoco quieren que la elección de este nombre sea motivo de broma por parte de sus compañeros en el colegio, o más adelante según se vayan haciendo mayores. Una curiosa consecuencia del auge de los asistentes de voz que estamos viviendo actualmente.

¿Pondrías a tu hija alguno de estos nombres? (Yo desde luego no).

Vía| Recode

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