El dilema de las actualizaciones en iOS: ¿Cuál elegir, automática o manual?

Entre las múltiples razones por las que prefiero iOS a Android, está la la de la posibilidad de disponer en mi iPhone de la versión más actual del Sistema Operativo, ya no solo durante mucho tiempo, si no también con la suficiente regularidad como para que mi dispositivo esté siempre seguro y dotado de las funciones más avanzadas. Y además no me tengo que preocupar de nada, porque la propia Apple se encarga de avisarme para que instale cada nueva versión e incluso, si soy de los que estoy al tanto de lo que se cuece en el mundo de la manzana, puedo descargarla yo mismo en cuanto me entero de que ya está disponible.

Sin embargo, seguro que muchos de vosotros os habéis dado cuenta de que no es lo mismo elegir una opción que la otra. Es posible que las actualizaciones automáticas sean más cómodas y nos ahorren tiempo, sin embargo, pese a su nombre, no se descargan automáticamente en cuanto hay una versión disponible, si no que de hecho suelen retrasarse más que si elegimos descargarlas manualmente. Entonces ¿Cuál de las dos deberíamos elegir?

Decíamos que las actualizaciones automáticas, lejos de instalarse en cuanto la versión está disponible, suelen demorarse bastante más tiempo. De hecho, a veces no lo hacen hasta semanas después de que el Software en cuestión haya visto la luz. Quizás pueda parecer un despropósito y automáticamente (nunca mejor dicho) ya nos haga decantarnos por elegir las actualizaciones manuales y así estar al día cuanto antes, pero lo cierto es que tiene bastante sentido que sea así.

Según ha explicado Craig Federighi, máximo responsable del departamento de Ingeniería de Software de Apple, a un usuario curioso, se elige de manera muy consciente que cada nueva actualización de iOS esté disponible primero para aquellos que explícitamente quieran descargarla de forma manual. Entonces, entre una y hasta cuatro semanas más tarde, una vez que Apple ya recibido suficiente feedback al respecto y comprobado que todo ha ido bien, es cuando se da luz verde a las descargas automáticas.

¿Cuál elegir entonces?

Pues es cuestión de gustos, la verdad. Si queremos estar a la última cuanto antes y confiamos lo suficiente en la fiablidad de la marca, seguramente somos ya de los que optamos por la descarga manual en cuanto nos enteramos que hay una nueva versión disponible. Sin embargo, si preferimos la seguridad o no nos apetece estar pendientes del tema, es buena idea que sea el propio iPhone el que se encargue de todo y así nos podamos centrar en otras cosas.

iOS #actualizaciones