El éxito de Apple Watch pone en aprietos a la industria relojera tradicional
Aunque cuando el Apple Watch apareció en el mercado los fabricantes de relojes suizos no lo vieron como un competidor serio a tener en cuenta, es posible que a tenor de las cifras que barajan los principales analistas, quizás deberían empezar a hacerlo.
Y es que el reloj de Apple se ha convertido en el smartwatch más popular durante el último trimestre fiscal de 2015, copando el 63% de la cuota de mercado mundial, lo que supondría la nada despreciable cantidad de 5,1 millones de unidades vendidas durante ese período.
Ventas totales que se estiman alrededor de los 8,1 millones de smartwatches despachados en todo el mundo durante el citado cuarto fiscal, incrementándose hasta en más de un 300% respecto del pasado año, cuando los wearables no eran ni mucho menos tan populares como ahora y apenas se vendían 1,9 millones de estos dispositivos.
Ahora, eso es lo que prácticamente vende solo Samsung, la segunda marca en el ranking con sus 1,3 millones de relojes inteligentes vendidos y que, si suma esos resultados a los de Apple, entre los dos vendieron ocho de cada diez de estos dispositivos durante la pasada temporada navideña.
Y, como adelantábamos en el titular de este artículo, eso tiene consecuencias en la industria tradicional de fabricantes suizos, cuya cuota de mercado descendió casi un 5% frente a los resultados del pasado año, con 7,9 millones de relojes vendidos frente a los 8,4 millones de 2014.
Según Neil Mawston, Director Ejecutivo de Strategy Analytics, la industria suiza ha tardado mucho en responder a la aparición del smartwatch, practicando la estrategia del avestruz de esconder la cabeza en la arena para evitar ver lo que estaba pasando a su alrededor y cruzando los dedos para que el concepto no triunfase, algo que, obviamente, no ha terminado sucediendo.
Para que nos hagamos una idea, Tag Heuer y el resto de las marcas del país apenas han sumado poco más del 1% durante el último trimestre fiscal del año, a años luz de Apple o Samsung.
Vía | Strategy Analytics
Comentarios cerrados