El iPhone SE es menos resistente a las pruebas de esfuerzo que el iPhone 6s

El iPhone SE es menos resistente a las pruebas de esfuerzo que el iPhone 6s

Escrito por: Carlos Villar    4 abril 2016    2 minutos

No se si os acordáis ya, que ha llovido bastante, que se dice, pero cuando salió el iPhone 6, empezó a surgir una serie de aseveraciones que aseguraban que el teléfono era propenso a doblarse fácilmente y de las que nació aquel célebre caso bendgate que obligó a Apple a posicionarse al respecto y demostrar que el dispositivo era bastante más resistente de lo que se especulaba.

Ahora, con la salida del nuevo iPhone SE, el hecho de recuperar un chasis y una estructura en apariencia más resistente (heredada del iPhone 5s) y tener una pantalla de menor tamaño, bien podíamos estar ante un dispositivo más resistente que los tope de gama de la actual línea iPhone, pero las pruebas hablan más bien de lo contrario.

Las pruebas de esfuerzo y resistencia realizadas por la compañía proveedora de extensiones de garantía SquareTrade realizadas al iPhone SE, demuestran que el el iPhone SE es menos resistente tanto a las pruebas de presión, a la de inmersión en líquido y a la de caída.

Y eso que, como ya hemos dicho, su diseño más compacto en todos los aspectos podría hacernos suponer en un inicio que iba a ser más resistente a golpes o caídas, pero la realidad demuestra que ni mucho menos es más resistente que los ultrafinos iPhone 6s o iPhone 6s Plus.

[jwplayer file=»https://youtu.be/bWRnDVcfA3g»]

Por ejemplo, las pruebas realizadas por SquareTrade revelan que el iPhone SE se dobla si se le somete a presiones superiores a 160 libras, mientras que el iPhone 6s, a pesar de su aspecto más delgado, resiste hasta 170 libras. A esa presión, el nuevo iPhone ya ni siquiera funciona.

Bajo un metro y medio de agua, aproximadamente, el iPhone SE deja de funcionar antes de que ni siquiera haya pasado un minuto, mientras que el iPhone 6s aguantaba nada más y nada menos que media hora sumergido y, para colmo, cuando lo sacabas lo único que no funcionaba era el sonido. El iPhone 6s Plus sí que acababa estropeándose, pero al menos aguantaba más de diez minutos. Y a veces, incluso sobrevivía.

Si tiramos un iPhone desde unos dos metros, todos los modelos actuales rompen sus respectivas pantallas si caen con ella hacia el suelo, pero si se cae de lado y recibe el golpe en una esquina, tanto el iPhone 6s como el iPhone 6s Plus apenas se rayan, mientras que el iPhone SE sí que se raja.

La verdad es que no debería extrañarnos, al fin y al cabo el iPhone 5s ya sufría bajo las mismas condiciones en su momento y en Apple han trabajado mucho para mejorar la resistencia de sus productos en los dos años desde que el iPhone 5s salió al mercado.

A veces, las apariencias engañan…

Vía | SquareTrade

Reportajes


Comentarios cerrados