Quizás muchos de los que estéis leyendo ahora este artículo no sabréis a qué me refiero. Y en cierto modo es normal. A día de hoy, con el lanzamiento del Mac Studio o con el éxito de los procesadores M1, a nadie se le ocurre dudar que la gama Mac de Apple no goza de buena salud, pero no estamos hablando de hoy, si no de otro 4 de Abril. Más concretamente del 4 de Abril de 2017.
Si de algo ha presumido Apple desde que yo tengo conocimiento es de su seguridad. La seguridad de sus servicios y, sobre todo, la seguridad de su Software, especialmente de sus Sistemas Operativos. De hecho siempre ha sido el caballo de batalla frente a sus rivales, sobre todo Windows. Tanto es así que muchos nos decantamos por la marca de la manzana para sentirnos a salvo de virus y otras amenazas.
A día de hoy, el uso de sensores biométricos basados en el reconocimiento de la huella dactilar se ha convertido en un estándar en la industria tecnológica. Un elemento que en sí mismo engloba calidad en el dispositivo que la utiliza, sencillez de uso y, sobre todo, sensación de seguridad como medida de identificación del usuario a todos los niveles.
Face ID, el nuevo sistema de reconocimiento facial que ha estrenado el iPhone X ha demostrado ser un sistema de protección realmente seguro para nuestro dispositivo, pese a las suspicacias desatadas el mismo día de su presentación, destapándose como un estupendo sustituto para el siempre bien considerado sensor Touch ID.
Si habéis visto la Keynote del evento del pasado martes 12 de Septiembre, en el que se presentó por fin el esperado iPhone X, seguramente os fijasteis en un momento embarazoso que pasó Craig Federighi, uno de los ejecutivos más populares de Apple, mientras efectuaba una demostración de Face ID.
Desde 2013 llevaba Apple sin poner al día como debiera el que se supone que es su buque insignia en la plataforma de ordenadores: el Mac Pro. El equipo más profesional de la marca parecía estar condenado a su desaparición, pero hoy ha aparecido un rayo de esperanza en forma de una actualización a nivel interno, mínima, eso sí, pero suficiente como para hacernos pensar que el futuro de este modelo no pinta tan negro como el color de su carcasa.
La semana asada saltaban las alarmas en la comunidad Mac al ver peligrar Applescript y Automator entre otras en los ordenadores de Apple, al saber que la plaza que ocupa el responsable de tecnología de automatización dejará de existir en breve, y quien se encarga de este menester será despedido.
Con la Keynote inaugural finalizada y la Conferencia Mundial de Desarrolladores ya en pleno funcionamiento, Phil Schiller y Craig Federighi, dos de las figuras más relevantes de la actual cúpula de Apple se juntaron ayer en una entrevista para hablar de las novedades más destacadas que se vieron en la presentación del lunes.
Empezábamos esta semana con un buen susto, al descubrirse el primer caso conocido de ransomware en OS X. La última versión (la penúltima, ahora) del cliente de BitTorrent Transmission llevaba consigo un malware que secuestraba tu Mac. Por suerte, se reaccionó con celeridad y en apenas unas horas estaba disponible una versión segura, aunque por entonces ya se habían descargado la versión infectada más de 6.500 usuarios.
La duración de la batería, por mucho que haya mejorado en los últimos modelos, sigue siendo el principal talón de Aquiles de los smartphones y de los dispositivos móviles modernos, como el iPhone o el iPad, y uno de los puntos en los que el usuario siempre se fija a la hora de gestionar el uso de los mismos, intentando que (al menos) aguante toda una jornada con un buen uso.
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