Todos estamos contando los días que faltan para el lanzamiento del iPhone 7 tras su presentación este próximo miércoles en el Bill Graham Civic Center de San Francisco, sin embargo, es ley de vida que cuando unos vienen otros se van, o como se suele decir: "antes de entrar, primero hay que dejar salir".
Detrás de los focos que alumbran relojes y tabletas con puntero, altas definiciones y portátiles gruesos como el papel de fumar, hay ciertos productos que nadie les hace caso; ni los usuarios, ni la propia Apple. No se habla de si se venden o no, y hace lustros que no se actualizan. Y sin embargo, en Cupertino se empeñan en mantener en catálogo.
Recuerdo que hubo un tiempo en que las actualizaciones del antaño conocido como iPhone OS eran recibidas de maneras diferentes dependiendo del gadget que tuvieras. Si tenias un iPhone, alegría, como en todas las actualizaciones. Pero si tenías un iPod touch la primera reacción era quejarse porque estas actualizaciones eran de pago. Y esto no cambió durante bastante tiempo. De esta forma muchos dibujaron al usuario de primera y al usuario de segunda y, en medio, Apple, que no hacía nada para remediarlo.
Tan ilusionados nos ha dejado el nuevo iMac de 27 pulgadas con Pantalla Retina 5k como decepcionados en oposición nos deja la actualización de la nueva generación del Mac mini que Apple presentó conjuntamente en el evento del pasado 16 de Octubre.