Cuando Apple decidió incorporar el sensor Touch ID al botón Home del iPhone 5s, sin duda realizó un salto cualitativo en la seguridad aplicada a sus dispositivos iOS, personalizándolos y protegiéndolos, al menos en mi opinión, de una manera más efectiva que mediante las viejas técnicas de pins o contraseñas de usuario.
Las patentes son el primer paso en el que basar los productos y dispositivos del futuro y si es así, la que acaba de obtener Apple sobre un teclado que incorpora tanto las habituales teclas mecánicas como sensores multitáctiles sobre las mismas capaces de reconocer acciones gestuales, podría suponer un avance que cambiaría la arquitectura de los actuales portátiles.
Cuando los rumores sobre la existencia de un iPad de 12 o 13 pulgadas, conocido por el momento como el iPad Pro, empezaron a acercarse más a la realidad que a la ficción, uno de los datos que más llamó la atención fue que en Apple parecían que iban a dejar atrás ese interfaz natural que tanto maravillaba a Steve Jobs (el dedo) por un stylus.
Apple quiere convertirse en un estandarte de la alta tecnología aplicada a nuestra vida diaria, trascendiendo al simple ocio digital que nació con iTunes y el primer iPod. Si el inminente Apple Watch es un buen ejemplo de lo que os estoy contando, hoy ha aparecido otro indicador de por donde pueden ir los tiros de la compañía en un futuro no lejano.
La necesidad que supone, en la actualidad, el mejorar los sistemas de seguridad de nuestros dispositivos móviles, está llevando a los fabricantes a esforzarse por crear métodos lo más inviolables posibles y que protejan toda la información que solemos llevar encima de que sea accesible por personas no autorizadas.