El nuevo iOS 14 (y los mismo vale para iPadOS 14) está lleno de novedades, algunas más evidentes y anunciadas casi a bombo y platillo y otras que quizás pasan más desapercibidas y no descubrimos que existen hasta que las utilizamos.
Ayer, a última hora de la noche, Apple daba por fin luz verde a la publicación de iOS 14 (y su versión equivalente para el iPad) y todos los poseedores de dispositivos compatibles podrían por fin empezar a descargárselo y a descubrir de todas las novedades que brinda esta actualización del Sistema Operativo.
Una de las novedades más relevantes y que más ha llamado la atención de iOS 14 ha sido sin duda el cambio en la gestión de la privacidad de los usuarios. El próximo Sistema Operativo prometía bloquear los sistemas de rastreo que algunas apps dicen utilizar únicamente con fines publicitarios, para mejorar nuestra experiencia en ese sentido y poder proporcionarnos ofertas más acordes con nuestros gustos y costumbres.
Facebook no deja de sorprendernos. De sorprendernos para mal, desgraciadamente. A estas alturas supongo que no debería resultar noticiase que almacene todas nuestras interacciones entre contactos. Que vigilen qué decimos y a quién se lo decimos, que disponga de todas las fotos o vídeos que subimos o que sepa qué páginas nos gustan o a que grupos pertenecemos. Al fin y al cabo es La Red Social por excelencia y, no guste o no, a eso no atenemos si queremos formar parte de ella.
Parece que los usuarios de los timbres inteligentes de la compañía Ring tienen aún más motivos para desconfiar de la seguridad de sus datos. Si a principios de este mismo mes de Enero conocíamos que algunos empleados de la empresa habían podido ver los vídeos en la Nube de sus clientes, ahora descubrimos que la falta de privacidad es aún mayor y más preocupante.
Nos preguntábamos el otro día si la policía y otras autoridades tenían la competencia para acceder a los datos almacenados en nuestros iPhone y si Apple debería defender la privacidad de sus clientes y usuarios o ceder ante las presiones de dichas autoridades.
La polémica de si las autoridades tienen derecho a acceder a nuestros smartphones vuelve a la palestra y lo hace, como no, con Apple y el Gobierno de los Estados Unidos como protagonistas. El mes pasado, un oficial de la Fuerza Aérea de Arabia Saudita que se encontraba en una misión de entrenamiento en la Base de Pensacola disparó a tres marines estadounidenses antes de ser finalmente abatido.
A finales del año pasado nos ponía en alerta el descubrimiento de que el iPhone 11 Pro continuaba compartiendo su geolocalización aún cuando sus usuarios habían desconectado dicha opción. Nos alertaba porque significaba una intrusión flagrante a nuestra privacidad, más aún cuando esto se hacía ya no sin autorización, si no sin conocimiento de los propios usuarios.