El CEO de Apple, Tim Cook, se encuentra estos días de visita por el continente europeo y además de tener tiempo para pasarse por diversas tiendas de la marca en Francia o Alemania y recibir un doctorado honorífico por la Universidad de Glasgow, también ha aprovechado para ocuparse de asuntos más relevantes.
Cuando el Brexit, la decisión de Reino Unido de rescindirse de la Comunidad Europea, se hizo efectivo, los que trabajamos a medio camino entre ambos lados enseguida empezamos a calcular cómo nos iba a afectar el cambio. Cómo nos iba a afectar a nuestros derechos y sobre todo, a nuestros bolsillos, porque la Libra no se iba a quedar quieta, ni mucho menos, como no se tardó en comprobar.
Normalmente, cuando uno piensa en el uso de herramientas como el iPad en la comunidad escolar, suele hacerlo identificándolas como un modelo perfecto de integrar las nuevas tecnologías que acabarán haciéndose habituales con el tiempo con el modo de aprendizaje más tradicional, consiguiendo que la unión de ambas suponga una mejora para la educación del alumno.
El reciente referéndum por la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea y cuyo resultado final dio la victoria a los partidarios del Leave, o lo que es lo mismo, su salida también conocida como Brexit, ha provocado un terremoto político y económico en el país cuyas primeras consecuencias ya se están notando.
Apple Pay dio por vez primera el salto fuera de los Estados Unidos este verano. Los usuarios británicos ya pueden realizar sus compras pagando con Apple Pay en un buen número de comercios, e incluso permite pagar el transporte público.
El Tribunal Superior de Justicia del Reino Unido ha convertido a todos los usuarios de ordenadores en proscritos de la noche a la mañana, estableciendo un fallo que considera ilegal la creación de una copia de contenido con derechos de autor sin la autorización directa del propietario de estos derechos.