Sí, es cierto que Apple siempre ha defendido la política de no admitir ninguna aplicación de terceros que imitase o tuviera las mismas funciones que las aplicaciones propias para iOS, manteniendo la postura de que podrían resultar confusas (sic) para el usuario, pero el caso de Voice Answer merece ser comentado por un detalle que, en mi opinión, marca la diferencia.
En más de una ocasión habréis podido leer que Apple no permitía (o retiraba) alguna aplicación de su App Store porque contravenía alguno de los términos preestablecidos para ello, dejando bastante claro que la compañía estudiaba y evaluaba a conciencia la temática de los programas a los que terminaba dando luz verde.