Como seguro que muchos de vosotros sabréis ya, no hay más que ver la avalancha que la noticia ha creado (afortunadamente casi siempre para bien) en todas las Redes Sociales, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos ha aprobado el pasado viernes la igualdad de derechos en el matrimonio, lo que permite que parejas del mismo sexo puedan por fin casarse en todos los Estados de la Unión.
El CEO de Apple mantuvo el pasado martes un encuentro con la Viceprimera ministra china, Liu Yandong, durante su estancia en Beijing. Una reunión en la que se trataron diferentes temas, como de la cooperación en materia de educación o un mayor acercamiento tecnológico entre Estados Unidos y el gigante asiático.
Tal y como ya os contamos ayer, Tim Cook ha comenzado esta semana viajando a China para anunciar un nuevo programa medioambiental en aquel país. Aunque durante su estancia también ha aprovechado para tratar otros asuntos relacionados con el mercado chino. El directivo ha declarado a la agencia de noticias china Xinhua que Apple está actualmente negociando con las instituciones financieras con el objetivo de poder ofrecer el servicio de pagos móviles Apple Pay a los consumidores chinos lo antes posible.
No cabe duda de que el mercado chino se ha convertido en casi una obsesión para Apple, con continuos guiños hacia ese territorio incluso en los eventos de presentación de nuevos productos. Seguro que recordáis la cara que se nos quedó a los occidentales al ver una demostración del funcionamiento de WeChat en el Apple Watch durante el evento de presentación del pasado mes de septiembre.
Tras un tiempo desparecido de la primera línea de noticias, eclipsado por la apabullante llegada del Apple Watch, que ha acaparado todas las noticias, o por otros rumores más plausibles y cercanos en el tiempo como los nuevos servicios en streaming, parece que el tema del coche fabricado por Apple vuelve a asomar la patita por los medios.
La tradicional subasta por poder compartir mesa y mantel con Tim Cook, decimos tradicional porque ya va por su tercera edición, por llamarlo de alguna manera, ha finalizado ya con otro éxito a sumar a la iniciativa, ya que la máxima puja ha llegado a los 200.000 dólares, unos 178.000 Euros al cambio.
Es ya todo un clásico que tras el lanzamiento de un nuevo producto de Apple aparezcan a los pocos días las cifras con el coste estimado en dólares de los componentes que lo integran, y seguidamente, los menos partidarios de la marca aprovechen para echarse las manos a la cabeza comparando esas cifras con el precio final de venta. Por supuesto, en esa comparativa nunca tienen en cuenta otros costes, como la publicidad, la investigación y desarrollo -los avances tecnológicos no caen de los arboles-, o el soporte post-venta.
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